
Vendiendo varios miles de unidades desde 2015, la Tracer 9 de Yamaha ha sido una de las motos del exitoso segmento sport-turismo que más se ha vendido. Ahora, en 2021 es más rápida, más ligera y más puntera gracias a una completa renovación, que consigue un sobresaliente equilibro para aquellos que buscan una máquina como para viajar sin tener que renunciar a la diversión en curva.
La Yamaha Tracer 900 debe mucha parte de su éxito a su fama de ser una moto realmente capaz de devorar kilómetros con un poco de deportividad, gracias a su motor CP3 (tecnología Cross-Plane de Yamaha) de tres cilindros. Y como siempre hay un margen de mejora, Yamaha se puso manos a la obra para conseguirlo llegado a presentar una nueva versión donde más del 80% de la moto se ha renovado y mejorado, como ya vimos en nuestra visión sobre la nueva Yamaha MT-09.

Para empezar, el vibrante motor CP3 de la versión 2021 no sólo es 42cc más grande, gracias a una carrera un poco más larga, sino que también ha sido rediseñado, con todo, desde pistones hasta inyectores de combustible reposicionados y otros componentes que han aligerado el peso del conjunto del motor y aumentado el par en más de un 5%, 1500 rpm antes. Además, teniendo en cuenta que cumple la normativa de emisiones EURO5 y nos añade un 3% más de potencia máxima hasta los 119 CV.
Todo ello no deja invariable la eficiencia y consumo de la nueva Tracer 9 GT, sino que lo mejora considerablemente, una ventaja muy a valorar a la hora de adquirir una sport-turismo pensando en viajes de media y larga distancia.
En comparación con la MT-09, tiene una primera y segunda marcha más larga, lo que debería la hace más dócil en comparación con la nerviosa MT-09, con la que comparte el nuevo chasis más ligero, más rígido y más robusto que el anterior modelo, con un posicionamiento de su compacto motor 5 grados más vertical, que ofrece mayor distancia entre ejes gracias a un nuevo basculante más ligero, 64 mm más largo que en su hermana la MT. Todo ello nos da una moto más estable y más cómodo para viajar.
Al igual que la MT, la Tracer 9 GT viene equipada con unas llantas más ligeras de 10 radios fabricadas con tecnología de la propia marca.

Ni que decir tiene que el paquete electrónico no se va a quedar atrás, incorporando mucha tecnología que proviene de los avances en sensórica para automoción. La Tracer 9 GT incluye una serie de ayudas al piloto y modos de conducción que se integran en una unidad de medición inercial (IMU) de seis ejes, y que se transmiten al piloto a través de un nuevo cuadro de mandos doble TFT que parece de avión de combate. También han evolucionado la posición de conducción para conseguir una postura más cómoda, y han dotado a la nueva Tracer 9 GT de estribos, manillar y asiento ajustables en dos posiciones, siendo este último una simple vuelta de llave para conseguir una diferencia de altura de 15 mm. También hay una pantalla renovada, carenados laterales y protectores de manos que nos librarán del molesto aire de cara en largas distancias por autopista.
Esta versión GT es superior a la Tracer 9 normal y viene equipada con suspensión semiactiva Kayaba regulable muy fácilmente, faros LED con proyección en curva, cambio semiautomática Quickshifter con indicador en panel, puños calefactables con amplia regulación calorífica, asiento y maletas de diseño superior.

Las maletas laterales son fáciles de acoplar y usar con el simple uso de la llave de contacto, nada engorrosas. Tienen la capacidad suficiente para que metas un casco integral a cada lado o una mochila para cada viajero.
La posición de conducción es bastante espaciosa y el asiento del pasajero más cómodo de lo normal. Todo está muy bien acabado y posicionado, aunque creo que la configuración del panel de instrumentos de doble pantalla parece un poco extraña y debería estar un poco más arriba. No es que los caracteres sean pequeños sino que hay que bajar la vista para buscar la información. Afortunadamente, cuando se enciende es muy útil y fácil de navegar con los interruptores de la pila izquierda y la rueda joystick de la piña derecha.
Metidos en kilómetros, se nota la perspectiva turismo en el diseño y la ergonomía. Quizá el asiento, al igual que nos pasaba en la MT-09, nos tiende a llevar hacia el depósito por algún tipo de inercia que se nos escapa, pero con echarnos un poco para atrás para buscar la mejor posición, todo solucionado.

La Yamaha Tracer 9 GT del 2021 es una moto elegante, la parte turismo predomina un poco más que la sport, siendo muy divertida en curva y todas las opciones que incorpora y que la diferencia de precio respecto a la versión básica están más que justificados, tanto las maletas como los puños calefactables, el control de crucero, la suspensión electrónica y el cambio quickshifter nos harán el viaje mucho más agradable.
Lo que si que hay que hacer es ajustar la precarga de la suspensión manualmente para compensar cuando llevas pasajero aunque sea electrónica, pero tardarás medio minuto.
Nuestra parte favorita tanto de la Tracer 9 como de la MT-09 siempre ha sido lo bueno que es el motor, pero gracias a esa enorme serie de actualizaciones, ahora es mejor en casi todos los sentidos. Como era de esperar, funciona a las mil maravillas como paquete de turismo deportivo, ya que la potencia y el par motor adicionales hacen que sea emocionante y confortable a la vez.

Sigue manteniendo ese nervio de la MT-09 cuando se acelera, teniendo en cuenta que las diferencias entre ambas son mínimas, en la Tracer 9 GT penaliza un poco la relación peso-potencia porque vamos un poco más «cargados» pero sigue siendo fácil, suave y silenciosa de llevar, y sin embargo, cuando damos gas, nos enseña toda la potencia que desarrolla el CP3, como si tuviera doble personalidad.
La suspensión semiactiva funciona muy bien en las curvas, proporcionando una conducción sensible e intuitiva, y mucho agarre gracias a los Bridgestone que incorpora.

La electrónica también es impresionante, ofreciendo el nivel justo de injerencia en los modos de conducción 3 y 4, más en el 4 que se supone es el modo lluvia, pero el control de crucero y los puños calefactados son realmente buenos, fáciles de usar y eficaces. El control de tracción también se deja nota en situaciones menos adherentes y el sistema de frenado con ABS es más que notable trabajando con las amortiguaciones.

Realmente la Yamaha Tracer 9 GT son dos motos al precio de una, es el mejor binomio sport-turismo que hemos probado, equilibrada y cómoda para hacer kilómetros sin dejar de disfrutar en carreteras sinuosas. Sin duda, mejora mucho las anteriores versiones de la Tracer 900 en casi todos los sentidos, aumenta un poco el precio esta versión GT, pero cuando la probéis, notaréis la diferencia.
Os dejamos algún detalle más en nuestro video que lamentablemente no tiene el mejor audio de los posibles por la cantidad de aire que hacía el día que lo grabamos. Nuestras disculpas por adelantado.
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